Hoy todos quieren ser artistas visuales

Por GADU

Hoy todos quieren ser artistas plásticos, pintores, escultores, y cuanta vaina se pueda crear lo denominan arte. Yo creo que todo esto se puede lograr a medida que vas adquiriendo conocimientos y técnicas para desarrollar un proyecto. Me explico: no puedes hoy intervenir un objeto y denominarlo arte solo porque tiraste unos chorros de pintura y se te ocurrió decir que es una pieza artística. Eso se denominaría “arte utilitario”, el cual esta bien cuestionado por muchos conocedores de la materia.

No puedes dibujar y hacer algo que ya otra persona hizo porque eso es plagio, así cambies los colores de la pieza y trates de modificar y ocultar rasgos. Hay que hacerse un nombre con el tiempo, y eso solo se logra participando en cuanto evento de arte y exposiciones te puedas inscribir, cumpliendo las bases de cada evento, elaborar un curriculum y nutrirlo de experiencias.

Veo con mucho estupor que cualquier pendejo se hace llamar artista y cualquier artista se hace el pendejo con este tema. Cualquiera podría pensar que soy un pendejo a quien llaman artista, pero al menos me preceden mi constancia, y mis años de estar dedicado solo al arte naif. No sé si soy bueno, pero les aseguro que cada pieza mía le dará color y vida a su hogar, oficina o espacio. Son 26 años dedicado exclusivamente a pintar y a hacer lo que me gusta. He visto crecer y caer a muchos; el arte se siente y depende mucho de tu estado de vida. Hay personas que no entienden que se requiere de un estado tranquilo y paz para desarrollar un proyecto alegre y lleno de color. Habrá quien pinta atormentado y saca un proyecto adelante con éxito, pero no es mi caso.

Por otra parte, veo cómo cada quien da valor a su pieza como le da la gana, si bien es cierto que para uno su trabajo no tiene precio, también es bien cierto que debe ser curado, tazando y de acuerdo a tu trayectoria sumar un valor, pero en distintas ferias de arte me tropiezo con piezas de valores exuberantes que no sabes a quién carajo se le ocurrió esa suma. Peor aun: ver personas que por solo esnobismo compran y se hartan de presumir. No me refiero a nadie en particular, pero existen. Yo soy un artista naif, y me considero uno de los mejores. No pretendo con esto crear polémica, pero aconsejo a los nuevos coleccionistas de arte que se fijen mucho en la trayectoria de cada artista, que su pieza no solo sea una simple decoración de pared o espacio, porque el arte, si es bueno, le servirá a futuro, o dejará entre sus objetos un legado.
Gadu

Printing service
SHARE
Previous articleMundo de Arte en Miami
Next articleAurélie Nemours