Suprematismo
El Suprematismo, un movimiento artístico radical que floreció en Rusia a principios del siglo XX, se caracterizó por su énfasis en la abstracción geométrica pura. Rechazando la representación tradicional de objetos y figuras, los artistas suprematistas abrazaron formas geométricas básicas, como cuadrados, rectángulos y círculos, y una paleta de colores limitada, principalmente negro, blanco y los primarios.
Kazimir Malévich, el visionario fundador del movimiento, buscó trascender las limitaciones del arte figurativo y explorar el “sentimiento puro” a través de la abstracción. Sus obras icónicas, como “Cuadrado negro sobre fondo blanco” (1915), desafiaron las nociones convencionales de lo que constituía el arte y provocaron un debate intenso en el mundo del arte.
El Suprematismo representó un punto de inflexión en la historia del arte, allanando el camino para movimientos posteriores como el Constructivismo y el Minimalismo. Su influencia se extendió más allá de las artes visuales, impactando campos como el diseño gráfico, la arquitectura y la moda.
La filosofía central del Suprematismo se basaba en la idea de que el arte debía liberarse de las ataduras de la representación objetiva y centrarse en la expresión de la esencia pura de la forma y el color. Los artistas suprematistas creían que las formas geométricas puras y los colores primarios tenían un poder emocional y espiritual intrínseco, capaz de evocar sentimientos profundos en el espectador.
A pesar de su corta duración, el Suprematismo dejó un legado duradero en el mundo del arte. Sus innovaciones radicales y su búsqueda de un lenguaje visual universal continúan inspirando y desafiando a artistas y diseñadores en la actualidad. El Suprematismo no solo revolucionó la forma en que entendemos el arte, sino que también abrió nuevas posibilidades para la expresión creativa y la exploración de la abstracción.
- Suprematismo es la supremacía de la abstracción. Es abstracción insuperable. El artista representa su cosmovisión, su visión del universo, a partir de formas geométricas puras.
- Es un movimiento ruso (al que podemos ubicar entre 1913/15 y 1923) que propone la abstracción geométrica. Un lenguaje plástico que influirá decisivamente en el diseño occidental y en otros movimientos como el constructivismo ruso (que vendría a ser su “continuidad”), el neoplasticismo y la Bauhaus.
- Imaginemos la provocación intelectual que significan para su época las primeras obras, que son realmente extremas (el adjetivo “extremo” es sinónimo de “supremo”). Sus nombres lo dicen todo: Cuadrado negro sobre fondo blanco o El cuadrado negro y el cuadrado rojo. Con el tiempo, se irán agregando a las obras otras formas como el rectángulo, el trapecio y la cruz . Los colores son simples y puros: amarillo, rojo, verde, azul, y también usan el negro, el blanco y el gris.
- Lo novedoso, más allá de la cuestión formal, es que el artista muestra el universo sin utilizar las cosas que componen el universo. Hay un ensayo de Malévich, el máximo representante del suprematismo, que además de tener el nombre del movimiento se llama El mundo de la no-representación.
Pero como es imposible hacer algo sin que eso represente la cosmovisión de quien lo hace, podemos decir que se trata de “la representación del universo sin objetos”. - ¿Por qué es tan importante que haya artistas que hayan planteado arte a partir de un par de formas geométricas de colores? Fundamentalmente porque nos hace reflexionar: si hay mil artistas observando un árbol, habrá mil miradas diferentes sobre el árbol. Y si esos mil artistas observan algo tan objetivo como un círculo rojo, también tendremos mil miradas diferentes sobre el círculo rojo. La realidad es, en definitiva, la mirada de cada uno sobre las cosas, la manera en que cada uno asocia las cosas, buscando su propia explicación, su propia armonía.